El organismo del Reino Unido promete igualar el ritmo de Washington en la supervisión del mercado de stablecoins de 310.000 millones de dólares
El Banco de Inglaterra ha anunciado que presentará su tan esperada consulta sobre regulación de stablecoins el próximo 10 de noviembre, en un movimiento estratégico para mantener el paso con Estados Unidos en la supervisión de este mercado valorado en 310.000 millones de dólares. La subgobernadora Sarah Breeden dejó claro que el Reino Unido no tiene intención de quedarse rezagado con las stablecoins frente a su principal aliado económico.
Coordinación transatlántica en marcha
Durante su intervención en la conferencia SALT de Londres, Breeden enfatizó la importancia de que ambas naciones trabajen de forma coordinada. «He estado hablando con la Reserva Federal… Los reguladores de allí y nuestros ministerios de finanzas están trabajando juntos», declaró la funcionaria, dejando entrever que la sincronización regulatoria es una prioridad absoluta.
Esta colaboración cobra especial relevancia tras la aprobación en Estados Unidos de la histórica Ley GENIUS en julio pasado, que estableció un marco legal claro para los emisores de stablecoins. El anuncio del Reino Unido responde a las críticas de grupos de defensa del sector cripto, que habían advertido que el país estaba perdiendo terreno en innovación y política regulatoria, sobre todo con las stablecoins.
Un sistema de dos niveles con límites temporales
Según informes de Bloomberg y Reuters, la propuesta del Banco de Inglaterra se centrará inicialmente en las llamadas stablecoins «sistémicas», aquellas que se espera tengan un uso generalizado como medio de pago. Las stablecoins más pequeñas quedarán bajo la supervisión de la Autoridad de Conducta Financiera (FCA) con un régimen más ligero.
El marco regulatorio incluirá límites temporales a las tenencias: hasta 20.000 libras esterlinas (aproximadamente 26.000 dólares) para individuos y 10 millones de libras para empresas. Breeden justificó estas restricciones señalando que el mercado hipotecario británico, altamente dependiente de los bancos, podría ser vulnerable si los depósitos se trasladaran masivamente hacia stablecoins.
Sin embargo, estas propuestas de límites han generado fuertes críticas por parte de la comunidad cripto. Los grupos de presión del sector argumentan que tales restricciones no existen en otros centros financieros importantes y podrían dificultar la adopción, además de resultar costosas de implementar.
Impulso institucional de las stablecoins en el Reino Unido y proyección de crecimiento
Mientras los reguladores afinan sus propuestas, la adopción institucional de stablecoins continúa en ascenso. Gigantes de las transferencias de dinero como Western Union, SWIFT, MoneyGram y Zelle han anunciado planes para integrar soluciones basadas en stablecoins en los últimos meses, buscando hacer las transacciones internacionales más rápidas y económicas.
El Tesoro estadounidense estima que el mercado de stablecoins, actualmente valorado en 310.000 millones de dólares, podría alcanzar los 2 billones de dólares para 2028, lo que subraya la urgencia de establecer marcos regulatorios sólidos.
Canadá se suma a la carrera regulatoria
Reino Unido no es el único país acelerando sus esfuerzos regulatorios. Esta semana, el gobierno canadiense presentó su propio plan para regular stablecoins, que exigirá a los emisores respaldados por moneda fiduciaria mantener reservas suficientes y adoptar medidas robustas de gestión de riesgos. La iniciativa forma parte de un plan más amplio para modernizar el sistema de pagos del país.
Fuerza de tarea conjunta para el futuro digital
La cooperación entre Estados Unidos y Reino Unido va más allá de las declaraciones. En septiembre, ambos gobiernos anunciaron la creación de la Fuerza de Tarea Transatlántica para los Mercados del Futuro, un grupo conjunto liderado por el Departamento del Tesoro estadounidense y el Tesoro de Su Majestad.
Este organismo, que incluye a las principales agencias financieras de ambas naciones, tiene como objetivo determinar cómo pueden colaborar en la regulación de activos digitales y fortalecer la conexión entre los mercados de capitales americanos y británicos. Se espera que presente su primer informe de política con recomendaciones concretas antes de marzo de 2026.
Un momento decisivo para la regulación cripto
El Reino Unido ha tomado otras medidas recientes para posicionarse como un centro de innovación responsable en el sector cripto. El mes pasado, el gobierno anunció planes para nombrar un «campeón de mercados digitales» que liderará los esfuerzos de modernización de los mercados financieros mayoristas mediante tecnología blockchain. Además, la FCA levantó su prohibición de cuatro años sobre las notas cotizadas en bolsa respaldadas por criptomonedas, ampliando su disponibilidad más allá de los inversores profesionales.
Como señaló Breeden, «Nuestro objetivo es asegurarnos de que nuestro régimen esté en funcionamiento tan rápido como el de Estados Unidos». Con la consulta del 10 de noviembre, el Reino Unido dará un paso crucial en su ambición de equilibrar la innovación con la estabilidad financiera en la era de los activos digitales.
