La organización detrás de la blockchain Kadena ha anunciado el cese inmediato de sus actividades empresariales debido a condiciones de mercado desfavorables, provocando una caída dramática en el precio de su token nativo KDA de más del 60% en cuestión de horas.
El anuncio que sacudió al mercado
El martes 21 de octubre de 2025, Kadena sorprendió al ecosistema cripto con un comunicado en la red social X donde anunciaba que «ya no puede continuar con sus operaciones comerciales» y que cesaría de inmediato todas las actividades empresariales y el mantenimiento activo de la blockchain del token KDA. La organización expresó su agradecimiento a todos los participantes del proyecto, lamentando que las condiciones del mercado les impidieran continuar promoviendo esta plataforma descentralizada.
La reacción del mercado fue inmediata y brutal. El token KDA, que cotizaba alrededor de 0,23 dólares antes del anuncio, se desplomó hasta aproximadamente 0,09 dólares en apenas 90 minutos, representando una caída superior al 60%. En el momento de escribir este artículo, el precio de KDA se sitúa en torno a los 0,075 dólares, con una capitalización de mercado que ha descendido hasta los 30-32 millones de dólares, muy lejos de los casi 4.000 millones que alcanzó en su momento de mayor esplendor en noviembre de 2021.
La blockchain seguirá funcionando
A pesar del cierre de la organización Kadena, la blockchain en sí misma continuará operando. Esto es posible gracias a su naturaleza descentralizada basada en prueba de trabajo (proof-of-work). Los validadores independientes de KDA podrán seguir procesando transacciones y minando bloques sin intervención de la empresa fundadora.
En su comunicado, Kadena enfatizó que «la blockchain Kadena no es propiedad ni está operada por la compañía. Como una blockchain descentralizada de proof-of-work con contratos inteligentes, la red es operada por mineros independientes, mientras que los contratos inteligentes y protocolos en cadena son gobernados independientemente por sus mantenedores».
La organización mantendrá un equipo reducido durante el periodo de transición y pronto proporcionará un nuevo binario que asegure la operación ininterrumpida sin su participación, alentando a todos los operadores de nodos a actualizar lo antes posible.
Historia de un proyecto prometedor
Kadena fue fundada en 2016 por Stuart Popejoy y Will Martino, dos profesionales con credenciales impresionantes. Popejoy había liderado el Centro de Excelencia Blockchain de JPMorgan, mientras que Martino trabajó como líder técnico en el comité directivo de criptomonedas de la Comisión de Valores y Bolsa (SEC) de Estados Unidos antes de dedicarse a Kadena a tiempo completo.
El proyecto, que se lanzó oficialmente en 2019, recaudó aproximadamente 15 millones de dólares en tres rondas de financiación. Su propuesta de valor se centraba en combinar estándares de grado institucional con contratos inteligentes escalables y seguros, posicionándose como «la blockchain para empresas».
En su apogeo durante el mercado alcista de 2021, KDA llegó a cotizar por encima de los 27 dólares, alcanzando una valoración cercana a los 4.000 millones de dólares. Sin embargo, a pesar de sus fortalezas técnicas, Kadena luchó por mantener su relevancia en el mercado frente a la feroz competencia de blockchains más grandes como Ethereum y Solana.
El futuro de los tokens KDA sin Kadena
Aunque la organización se cierra, el token KDA continuará existiendo y operando. Según el calendario de emisión establecido, aún quedan aproximadamente 566 millones de tokens KDA por distribuirse como recompensas de minería hasta el año 2139, asegurando la estructura monetaria de la blockchain durante décadas.
Adicionalmente, hay 83,7 millones de tokens KDA programados para desbloquearse en noviembre de 2029. Kadena ha anunciado que consultará con la comunidad sobre cómo distribuir estos tokens, planteando interrogantes sobre el futuro gobierno del proyecto.
Lecciones para el ecosistema blockchain
El cierre de Kadena ilustra los enormes desafíos que enfrentan las blockchains más pequeñas para construir una base de usuarios sostenible y generar rentabilidad en un mercado altamente competitivo. A pesar de contar con una sólida financiación, un equipo experimentado y tecnología innovadora, el proyecto no logró atraer la adopción consistente y la confianza de los inversores necesarias para el éxito a largo plazo.
Este caso subraya que en el ecosistema cripto actual, la excelencia técnica por sí sola no garantiza la supervivencia. Los proyectos necesitan también estrategias efectivas de crecimiento, marketing, desarrollo de comunidad y, crucialmente, casos de uso reales que justifiquen su existencia en un mercado saturado.
