El mercado de futuros perpetuos descentralizados ha experimentado un crecimiento explosivo durante 2025, consolidándose como uno de los segmentos más destacados del ecosistema cripto.
En julio, estos protocolos procesaron un volumen de trading récord de 399.000 millones de dólares, superando en un 28% el anterior máximo histórico de 311.000 millones registrado en junio.
Hyperliquid lidera el crecimiento del sector de perpetuos
Según datos de la plataforma de análisis Artemis, Hyperliquid domina claramente este mercado, representando casi el 80% del volumen total de perpetuos descentralizados. Le siguen otros protocolos como ApeX, Drift y dYdX, aunque con una participación considerablemente menor.
El despegue de Hyperliquid coincidió con el lanzamiento de su token en noviembre de 2024. Antes de este evento, la plataforma procesaba entre 25.000 y 35.000 millones de dólares mensuales. Tras la llegada de su criptomoneda nativa, estos volúmenes se multiplicaron, oscilando entre 160.000 y 315.000 millones de dólares por mes.
Los exchanges centralizados mantienen su dominio
A pesar del impresionante crecimiento de las plataformas descentralizadas, los exchanges centralizados siguen liderando el mercado global de perpetuos. Binance, el mayor exchange de criptomonedas del mundo, maneja volúmenes diarios que van desde los 30.000 hasta los 200.000 millones de dólares, cifras que ponen en perspectiva el tamaño relativo del sector descentralizado.
La expansión regulatoria ofrece nuevas oportunidades para los perpetuos descentralizados
La expansión del sector coincide con un ambiente regulatorio más favorable en Estados Unidos, donde brokers y exchanges como Coinbase y Robinhood están lanzando sus propias ofertas de perpetuos. Coinbase inauguró en julio la primera plataforma de perpetuos regulada en el país, mientras que Robinhood anunció en mayo que ofrecería derivados perpetuos a clientes europeos durante 2025.
Este crecimiento refleja la maduración del ecosistema DeFi y su capacidad para competir con servicios financieros tradicionales, aunque aún queda camino por recorrer para alcanzar los volúmenes de las plataformas centralizadas establecidas.