En un claro ejemplo de los riesgos que enfrentan las Organizaciones Autónomas Descentralizadas (DAOs), la comunidad de Compound ha sido sacudida por un ataque de gobernanza que ha puesto de manifiesto las debilidades en la participación y los incentivos desalineados dentro de estos sistemas.
El 28 de julio, un grupo conocido como los Golden Boys, liderado por una figura prominente llamada Humpy, logró aprobar en gobernanza la Propuesta 289, que autorizaba la transferencia de 24 millones de dólares en tokens COMP desde el tesoro de Compound a un protocolo de rendimiento llamado goldCOMP, operado por los mismos Golden Boys, mostrando la fragilidad de las DAOs
Este movimiento fue posible gracias a que cinco billeteras delegaron más de 228,000 COMP (casi 12 millones de dólares) obtenidos del intercambio Bybit, lo que, combinado con los propios tokens del delegado, les otorgó más del 81% de los 400,000 COMP necesarios para que una propuesta de gobernanza alcanzara el quórum.
Reacciones y críticas
La comunidad de Compound no tardó en reaccionar. Prominentes miembros calificaron la Propuesta 289 como un ataque y solicitaron una respuesta unificada para rechazarla, pero sus esfuerzos fueron infructuosos.
Dennison Bertram, CEO de Tally Protocol, expresó su preocupación:
“Es aterrador que esto haya ocurrido, especialmente considerando los protocolos multimillonarios que podrían ser atacados en cualquier momento por una variedad de ballenas que podrían anteponer sus intereses a los de la comunidad”.
La gobernanza de Compound capturada, la debilidad de los DAOs
Los DAOs a menudo sufren de bajos niveles de participación, lo que abre la puerta para que grandes poseedores de tokens abusen de la gobernanza para avanzar propuestas que les beneficien personalmente.
Un estudio reciente de la Universidad Complutense de Madrid reveló que el 50% de los DAOs tienen menos de diez votantes, y en aquellos con entre 1,000 y 10,000 miembros, la participación en el proceso de gobernanza es menor al 30% para la mayoría de las propuestas. Además, más del 50% del poder de voto está controlado por menos del 1% de los miembros.
La respuesta de Compound
Después de una serie de intentos fallidos para pasar propuestas que beneficiaran su protocolo, los Golden Boys finalmente tuvieron éxito con la Propuesta 289.
Esta propuesta implicaba mover tokens COMP a su bóveda goldCOMP, lo que muchos en la comunidad consideraron una estrategia para desviar fondos. Alex Netto, CEO de Blockful, comentó:
“A primera vista, no parece un ataque, ya que esta ballena invirtió mucho dinero para tener un poder de voto significativo en el DAO de Compound. Sin embargo, al entender el patrón de comportamiento de este usuario, se empieza a pensar que esto es un ataque”.
En respuesta a la crisis, Compound negoció con Humpy y acordó introducir un mecanismo de staking que distribuye el 30% de las reservas actuales y futuras del protocolo a los stakers de COMP, a cambio de que los Golden Boys cancelaran la Propuesta 289.
Compound amenazó con usar su multisig centralizado para actualizar la gobernanza del proyecto y eliminar el poder de voto de la billetera que redactó la Propuesta 289 o distribuir un nuevo token excluyendo las billeteras que votaron a favor de la propuesta, si Humpy no cumplía.
Lecciones y futuro de los DAOs
El caso de Compound ha dejado lecciones importantes sobre la gobernanza en DAOs. Francisco Díaz, investigador en TalentDAO, destacó:
“Al final del día, las dApps se comportan como empresas, no como comunidades. Aunque hay memes y la gente ‘vibra’, al final, muchos proyectos DeFi y algunos DAOs toman decisiones para que el protocolo sea rentable”.
Los recientes eventos en Compound subrayan la necesidad de mecanismos más robustos para proteger a los DAOs de ataques de gobernanza.
A pesar de los desafíos, es crucial que estas organizaciones encuentren un equilibrio entre la descentralización y la seguridad para evitar que grandes poseedores de tokens impongan sus intereses sobre los de la comunidad.
El futuro de los DAOs depende de su capacidad para superar estas vulnerabilidades inherentes y garantizar una gobernanza verdaderamente representativa y equitativa.