Las recientes acciones judiciales iniciadas por la SEC contra Binance y Coinbase ampliaron el listado de criptomonedas consideradas como valores por el regulador. Pero, ¿Qué significa esto realmente?
Durante los primeros días de junio de 2023, la SEC ha iniciado una nueva ola de represión contra la industria de las criptomonedas.
En este caso, la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) ha arremetido contra dos de las principales plataformas de intercambio de criptomonedas, a saber, Binance y Coinbase, acusándolos de violar las leyes al ofrecer comercio de valores no registrados como tales a través de diferentes criptoactivos.
A lo largo de sus escritos de demandas, la agencia cataloga nuevos tokens y criptomonedas como valores, ampliando así el listado de criptoactivos considerados como tales por el regulador.
Pero, ¿sabemos qué implicaciones tiene clasificar a una criptomoneda como valor por la SEC? ¿Son realmente las criptomonedas valores? ¿Cómo se determina esta calificación? ¿Qué criptomonedas son realmente valores?
¡Bienvenidos a una nueva edición de “Aprende”! Donde, desde Whispr, queremos ayudaros a dar respuesta a estas y otras preguntas de interés.
¿Qué significa clasificar a una criptomoneda como un valor por la SEC?
Arrancando desde lo más básico, un “valor” hace referencia a cualquier instrumento o activo financiero cuya adquisición o enajenación pasa por un mercado financiero, como sería la bolsa de valores.
Estos valores, tienden a representar una forma de inversión en la que sus adquirentes compran un “derecho de propiedad” o un “derecho contractual” sobre el activo subyacente.
Por ejemplo, cuando un inversor compra una acción, adquiere una parte de la propiedad de la empresa emisora de la acción.
Si la empresa tiene éxito en el desarrollo de su negocio, con el consiguiente aumento de valor, el precio de la acción crecerá en la misma dirección. Este incremento en el precio permitirá al inversor vender su activo por un precio superior al de adquisición, obteniendo así una ganancia patrimonial.
No obstante, existen diferentes tipos de activos financieros considerados valores, como serían las acciones, bonos de empresas o gobiernos, fondos de inversión, los certificados de depósito (CD) o las letras del Tesoro.
Ahora, ¿qué criterios debe cumplir un activo para consideralo como valor? ¿Cómo aplicamos esto al sector de las criptomonedas?
El Test de Howey
La SEC considera que una criptomoneda es un valor siempre que cumpla con la definición de “contrato de inversión” de acuerdo con la Ley de Valores de 1933.
Esta definición incluye varios elementos, como la inversión de dinero en una empresa, la expectativa de obtención de ganancias futuras y la dependencia de la empresa en los esfuerzos de terceros para generar ganancias.
El criterio utilizado por el regulador, esta basado en la decisión del Tribunal Supremo de Estados Unidos en el caso SEC vs WJ Howey Co de 1946.
Fruto de este proceso, nació el conocido como “Test de Howey”, el cual establece que una transacción se considera como contrato de inversión si cumple con cuatro criterios:
- Una inversión monetaria: la inversión de dinero debe conformar una parte esencial de la transacción
- Expectativa de beneficios: dicha inversión se realiza con la expectativa de obtener una ganancia patrimonial
- Esfuerzo ajeno: esta ganancia debe ser resultado de los esfuerzos de terceros, como podría ser un promotor o un patrocinador.
- Dependencia de terceros: de acuerdo con el punto 3, los inversores carecen de control sobre el resultado de su inversión, que depende en gran medida de los esfuerzos de otros.
De cumplirse todos los puntos, la transacción es considerada como un contrato de inversión y, por lo tanto, el activo es un valor sujeto a las regulaciones de la SEC.
Como hemos visto, para la agencia estadounidense y su presidente, Gary Gensler, un gran número de criptomonedas estarían dentro de la definición de valores de acuerdo con la interpretación de criterios expuestos anteriormente.
¿Son todas las criptomonedas valores excepto Bitcoin?
Todas las criptomonedas señaladas como valores por la SEC se emiten en redes blockchain cuyo funcionamiento está basado en Proof Of Stake (PoS).
Esto, demostraría una vez más la visión del regulador de que Bitcoin (BTC), con su red Proof Of Work (PoW), es posiblemente la única criptomoneda que no es un valor.
Además de esto, como parte de su interpretación del Test de Howey, aplicado a las criptomonedas, la SEC añadiría otros argumentos, tales como el rol y la participación de una preventa de los tokens en su origen, la divulgación de información y promoción de ciertas empresas y desarrolladores de los activos, la comercialización en mercados secundarios, así como otras interpretaciones que agregan argumentos a su visión.
En oposición, la industria de las criptomonedas en general ha mostrado su rechazo a esta interpretación de la SEC, asegurando que las criptomonedas no son valores en base a sus características tecnológicas, su funcionamiento a través de redes centralizadas y la intención de los inversores, entre otros argumentos.
La comunidad acusa a la SEC de utilizar una interpretación confusa y poco clara, debido a la ausencia de parámetros regulatorios concisos, que incluso le ha llevado a entrar en conflicto directo con otra agencia regulatoria, como sería la Comisión de Comercio de Futuros de Productos Básicos (CFTC).
¿Las criptomonedas son valores o commodities?
Esta cuestión sería el principal punto discordante entre la SEC y la CFTC.
Mientras la SEC considera catalogar todas las criptomonedas y tokens, a excepción de BTC, como valores, la CFTC aboga por una interpretación diferente, considerando que criptomonedas como Bitcoin y Ethereum (ETH) son en realidad productos básicos o mercancías (conocidas popularmente como commodities).
En este sentido, se posicionó la CFTC en su demanda a Binance:
“Un activo digital es todo lo que se puede almacenar y transmitir electrónicamente y tiene derechos de propiedad o uso asociados. Los activos digitales incluyen monedas virtuales que son representaciones digitales de un valor que funcionan como medios de intercambio, unidades de cuenta y/o reservas de valor. Ciertos activos digitales, incluidos BTC, EHT y LTC, y al menos dos monedas estables con respaldo fiduciario, Tether y Binance USD, así como otras monedas virtuales como se alega en el presente, son “mercancías”.
La CFTC es la encarga de supervisar los contratos de futuros, opciones y derivados que involucran cualquier producto básico y, en base a su criterio, considera criptomonedas como Bitcoin y Ethereum como commodities; obteniendo así jurisdicción sobre ellas según la Ley de Intercambio de Productos Básicos.
Aunque pueda parecer baladí, la clasificación de los cripto activos como valores o commodities tiene implicaciones de gran alcance acerca de su enajenación, dónde pueden ser listados y quién podría emitir una demanda en caso de excesos por parte del emisor; ya que, en ambos casos, la regulación de tratamiento es diferente.
¿Qué implicaciones tiene que las criptomonedas sean valores para la SEC?
En caso de que las criptomonedas fuesen finalmente clasificadas como valores, implicaría el sometimiento a la regulación de la SEC, con la obligación de registrarse ante el regulador y cumplimiento de un mayor número de exigencias legislativas; como publicidad de la información, presentación de informes, auditorías financieras, requisitos de capital, tarifas, custodia de activos, estándares de conducta etc.
Si una criptomoneda se considera un valor, la empresa emisora deberá adaptarse a los requerimientos de la SEC, que en general podrían volverse engorrosos, perjudiciales y negativos para la innovación tecnológica.
¿Es positivo para los inversores que sean valores para la SEC?
Algunas personas consideran que los requisitos regulatorios establecidos por la SEC buscan proteger a los inversores en criptomonedas de engaños, estafas y pérdidas de los fondos, debido a la inestabilidad de algunas empresas o malos actores.
Esta clasificación, añade otra capa de complejidad al debate acerca de la regulación de las criptomonedas en el mundo, aumentando las disputas sobre su adecuación a los marcos legales existentes.
Además, ello significaría un aumento en el escrutinio regulatorio, con la introducción de puntos centrales de control, que chocan frontalmente con el principio fundamental descentralizado tras la tecnología cripto; reduciendo así el entusiasmo entre aquellos usuarios que desean obtener una mayor autonomía financiera.
Igualmente, diferentes empresas y exchanges podrían optar por la supresión de dichas criptomonedas catalogadas como valores, con la finalidad de evitar demandas o caer bajo la regulación de la SEC.
En esencia, la clasificación de las criptomonedas como valores o no, supone un pilar fundamental de debate para la industria, con implicaciones de diverso tipo que pueden tener un impacto inimaginable.
En este sentido, la presión iniciada por la SEC hacia el sector de las criptomonedas, podría servir como ejemplo para otras jurisdicciones que buscar la forma de clasificar las criptomonedas.