Aunque el calendario marcaba el mes de marzo para Shanghai, la nueva actualización de Ethereum, parece que el equipo de desarrolladores cree poder tenerlo listo para la prueba pública a finales de febrero.
Los desarrolladores, habrían decidido no complicar la actualización y priorizar los retiros de fondos en staking.
Por lo tanto, la primera actualización tras el Merge (su paso de PoW a PoS) aplazará ciertas funciones que tenía programadas.
“Los desarrolladores tienen como objetivo lanzar redes de prueba públicas para la actualización de Shanghai/Capella el próximo mes y programar tentativamente el lanzamiento de la red principal para la actualización en algún momento de marzo de 2023”.
La decisión se habría tomado en la primera AllCoreDev de 2023, una reunión periódica en la que los principales desarrolladores se reúnen y debaten sobre el plan de desarrollo.
EOF se aplaza y no llegará con Shanghai
El hecho de poner el foco en el retiro de fondos en staking, ha obligado al equipo a aplazar otras funcionalidades, como los EVM Object Format o EOF, una de las mejoras más esperadas.
Con EOF se introducen una serie de modificaciones en las máquinas virtuales de Ethereum (EVM) que mejorarán el rendimiento de los smart contracts, además de reducir las comisiones.
De incluir EOF, ya sea de forma total o parcial, la actualización podría demorarse, ya que el cambio podría requerir también modificaciones en dApps compatibles con EVM.
Más de 15 millones de Ethereum bloqueados
Cabe mencionar que, desde el lanzamiento de la Beacon Chain, que dió origen a Ethereum 2.0, se han acumulado más de 15 millones de ETH.
Este programa de staking ha servido para crear validadores en la nueva blockchain y repartir recompensas, que en algún caso ha llegado a ser de cerca del 10%.
Actualmente se cuentan más de 496.000 validadores, que ayudan en el flujo y validación de transacciones y creación de bloques.
Por un lado, un retiro masivo podría impactar negativamente en el precio de ETH, pero si por el contrario, la nueva opción de retiro atrae a nuevos validadores, se produciría una reducción en los intereses y Ethereum se volvería cada vez más deflacionaria.