La SEC conocida como la Bolsa de Valores de Estados Unidos ha acusado a dos empresas del sector criptográfico por aumentar el precio de un token de manera artificial.
Según documentos aportados por la SEC, esta estafa supuso unas ganancias para la empresa acusada de mas de 36 millones de dólares.
La demanda presentada por la SEC, señalaba a Arbitrade, con sede en las Bermudas y Cryptobontix, una empresa ubicada en Canada.
En los documentos, aparecen un tercer miembro en este esquema, Max Barber, un conocido vendedor de oro internacional que, juntamente con Troy Hoog CCEO de Cryptobontix y James Goldberg CEO de Arbitrade fueron los responsables.
¿La SEC: En que consistió la estafa?
Tal y como afirma la SEC, estos miembros fueron responsables de una trama de pumpeo del mercado con el objetivo de aumentar el precio de sus tokens y vender antes que los inversores.
Es curioso, que el token seleccionado para realizar el entramado fuera Dignity (DIG)
En la demanda de la SEC, afirma que Hoog contó con el apoyo de desarrolladores rusos para crear el token Dignity, una criptomonedas propiedad de Hoog y Cryptobontix en la red de Ethereum.
Curiosamente, el exchange de Livecoin de procedencia rusa, tuvo la exclusividad de negociación del token, limitando así su suministro en un solo exchange.
En este momento, entró en juego el comerciante de oro, ya que Arbitrade y Cryptobontix afirmaron que el token estaba respaldado por oro, en concreto por 10 billones de dólares en oro propiedad de Sion.
Como era de esperar, Sion era propiedad de Barber, afirmando de esta manera que cada token DIG, tenia el respaldo de 1 dólar en oro.
Por ultimo, la empresa afirmo que todo su oro estaba auditado y certificado con el simple y macabro objetivo de transmitir confianza a los inversores.
Desgraciadamente la SEC afirma que tanto la compra del oro, como la posterior auditoria y certificación del respaldo del oro. Son falsos.
Meses más tarde el token toco los 0$